viernes, 18 de septiembre de 2009

DECLARACIONES DEL DECANO DE UNER SOBRE FONDOS MINEROS. Imperdibles!!


- El vie 18-sep-09, Asamblea Ciudadana Ambientalcdelu escribió:


De: Asamblea Ciudadana Ambientalcdelu
Asunto: DECLARACIONES DEL DECANO DE UNER SOBRE FONDOS MINEROS.




Paraná, 17 de septiembre de 2009
Fondos Mineros en la UNER. Continúa la Polémica.


Respuesta a las declaraciones del Decano de la Facultad
de Ciencias de la Salud (UNER) respecto de los fondos mineros

El Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud (UNER), Médico Jorge Luis Pepe, fundamentó su decisión de aceptar los fondos provenientes de “Bajo la Alumbrera” en la Edición Especial del Boletín Electrónico editado por la Secretaria de Extensión e Investigación de su facultad, fechado el día 8 de septiembre del corriente año1.
Llama poderosamente la atención que el Sr. Decano afirme haber mencionado en la reunión de su Consejo Directivo argumentos que son la copia textual de fragmentos de las declaraciones firmadas por el Decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, Héctor Hugo Trinchero, en una nota del diario Página 12 del día 4 de septiembre de 2009 (2). Publicar una opinión propia e institucional extractando párrafos completos de un texto ajeno, sin mencionar la fuente y haciendo suyas esas palabras, constituye una omisión que podría calificarse como carente de honestidad intelectual. Para mantener las mínimas condiciones necesarias para un debate invitamos al Decano Jorge Pepe a corregir públicamente su desprolijidad, y de paso a reflexionar sobre la pobreza de sus argumentos.
En la declaración de los decanos Trinchero y Pepe manifiestan que han tenido acceso a diversos informes sobre la contaminación producida por Minera Alumbrera Limited, los cuales no serían concluyentes ni unánimes. El decano de la Facultad donde se dicta la carrera de “Licenciatura en Salud Ambiental” dice no estar seguro (científicamente) de que esta explotación minera a cielo abierto contamine. En sus fundamentaciones omiten datos que son clave: el megaconsumo de agua, energía eléctrica y combustibles que tienen un impacto inmenso en el medio ambiente y en la población, como por ejemplo los 100 millones de litros de agua fresca que diariamente extraen en una zona semiárida, como es la provincia de Catamarca. Esto es sólo un ejemplo para ilustrar la magnitud del desastre que produce la megaexplotación Bajo La Alumbrera.
Podemos citar con precisión, y no con generalidades, que en los años 2003 y 2004 Gendarmería Nacional realizó análisis de las sustancias vertidas en el canal DP2 (depósito donde se vuelcan los materiales residuales del proceso de secado del concentrado de mineral, en la provincia de Tucumán) donde se registraron altos contenidos de cobre y sulfatos que superaban los limites establecidos por la ley 24.051 de Residuos Peligrosos. El Dr. Antonio Gustavo Gómez, Fiscal General en la Cámara Federal de Tucumán, señaló que la propia Secretaría de Minería de la Nación reconoció que Minera Alumbrera Limited “está produciendo contaminación, ya que arroja metales como sulfato, molibdeno y sólidos disueltos totales (SDT) en valores mayores a los permitidos". Ese informe, que consta en el expediente judicial, dejó de estar online en la web de Minería. (3)

A raíz de las evaluaciones mencionadas, la Cámara Federal de Apelaciones de la Provincia de Tucumán dispuso el procesamiento de Julian Rooney, en su calidad de Vicepresidente de Minera Alumbrera Ltd., por el delito de contaminación peligrosa para la salud, según el artículo 55 de la ley 24.051 de Residuos Peligrosos. Además, el señor Rooney es procesado por contrabando de minerales no declarados en la exportación de concentrado de mineral. En términos jurídicos y científicos está establecida la presunción de contaminación que incluso abarca varias provincias (específicamente: el Canal DP2 en la provincia de Tucumán, su conexión con el río Salí Dulce y --por medio de éste-- el Dique Frontal de Río Hondo en Santiago el Estero).
Sin embargo el Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud desestima estos hechos y plantea separar el debate sobre daños socio-ambientales respecto de los fondos que ingresan al sistema universitario por fuera del presupuesto genuino. Afirma que estos recursos son remitidos por el Estado y que, si seguimos la misma línea de pensamiento, deberíamos rechazar recursos incorporados a través de impuestos cobrados a otras empresas y actividades contaminantes. En primer lugar debe aclararse que Yacimientos Minerales Aguas de Dionisio (YMAD) y Minera Alumbrera Ltd. forman una Unión Transitoria de Empresas (UTE) que distribuye las regalías entre las Universidades Nacionales, o sea que los recursos no son transferidos desde el Tesoro Nacional.
Así mismo sabemos todos que la universidad recibe fondos de los Ministerios de Educación, de Trabajo, de Salud, de Planificación Federal, de Interior, de Desarrollo Social, de Relaciones Exteriores, de Jefatura de Gabinete y de la Presidencia de la Nación. Estos fondos corresponden a la distribución establecida por el Congreso de la Nación y por la adhesión de la Universidad a distintos programas y planes específicos. Así cada vez que esta institución resuelve formar parte de tal o cual proyecto específico toma una decisión política que asume el perfil, los objetivos, las metodologías y el financiamiento que suponen los mismos. En el caso de las regalías mineras, cuya distribución es ajena al presupuesto universitario en el Congreso de la Nación, debe asumirse la aceptación de estos fondos no ya como una decisión administrativa, sino como una decisión política que asume el contexto en que se da.
No podemos esconder la cabeza en un hoyo y pretender que nada sucede. No podemos ignorar que existe un gran movimiento social de resistencia a la mega-minería que ha tenido triunfos enormes, como en Esquel, donde la iniciativa de los universitarios colaboró en el rechazo de la instalación de la empresa Barrik Gold. Aceptar estos fondos convierte a la Universidad Pública en cómplice de las empresas transnacionales, además de profundizar el silencio que envuelve la contaminación de regiones como Andalgalá y el impacto sobre la salud de las personas. Nada hemos dicho hasta aquí del saqueo perpetrado por estas empresas de los bienes que son propiedad de todos los argentinos.
El compromiso con la rigurosidad científica en la Universidad Pública nos compromete –toda vez que hemos aprendido dolorosamente que la cientificidad “neutral” es cómplice de la barbarie- con la defensa de una buena vida para todos los seres humanos. Esto incluye la pregunta por los destinatarios, los actores, los beneficiados y los afectados de cada una de las investigaciones e intervenciones de nuestras instituciones; teniendo presente que no se trata sólo de ver o interpretar la realidad, sino de oír lo que en ella sucede.
La Universidad debe participar de la vida política y social del país, entre otros modos apoyando a los pueblos en su resistencia.

En este contexto las organizaciones de vecinos de Catamarca han recibido con entusiasmo los debates que empiezan a generarse en las Universidades Nacionales. Cada rechazo de los fondos es un acontecimiento político que fortalece la posición de quienes resisten --a lo largo de casi toda la cordillera-- al avance depredador de la mega-minería. La UNER puede convertirse en la primer Universidad Nacional que rechace este modelo de explotación. Todo depende de la independencia intelectual y del compromiso social que puedan mostrar quienes toman las decisiones en sus órganos de gobierno.

COMISION INTERCLAUSTROS UNIVERSITARIA
CONTRA LOS FONDOS MINEROS
UNER