sábado, 13 de enero de 2007

En la otra orilla tambièn hay Asamblea:


Asamblea por un Uruguay Natural Multiproductivo
(Unamu)


Fuente: www.uruguay-natural.org

¿Como nacimos?

Con el fin de obtener información más confiable y mayores conocimientos sobre esta especie de "Tsunami" que viene arrasando la producción tradicional, decidimos realizar una Asamblea en esta misma zona, con la exposición de científicos de la Facultad de Ciencias y la proyección de un video documental sobre los impactos ambientales del monocultivo forestal en Uruguay.
A la misma asistieron más de 100 personas que generaron un rico debate y la necesidad de formalizar el movimiento, promovido inicialmente por familias de productores rurales e integrantes de una Institución de Educación Popular coloniense
esta iniciativa la recogió un Edil departamental, gestionando la misma ante la Junta Departamental de Colonia, siendo acompañada con la firma de ediles de todos los sectores políticos.
Días después, nos hicimos presentes con una comitiva multisectorial, en la Intendencia Municipal de Colonia, comunicándole al Intendente esta moción aprobada, quien considero positiva la propuesta. También se le planteo la necesidad de crear una Mesa de Trabajo, con representantes de los diversos sectores productivos y sociales del Departamento, quienes junto a la Intendencia, elaborarían el ordenamiento territorial y productivo del Departamento.

Creación de la Asamblea:
La explosiva adhesión de múltiples sectores sociales a nuestro movimiento inicial impulsó la necesidad de darle una mayor amplitud.
Es por esto, que en la Asamblea del día lunes 19 de de marzo del presente año, realizada en la ciudad de Tarariras (Colonia), decidimos denominarnos "Asamblea por un Uruguay Natural Multiproductivo" (Unamu)
Este espacio, de amplia participación social y democrática, tiene como propósito promover el debate que proporcione los lineamientos hacia un país natural y multiproductivo, partiendo desde el fortalecimiento de la diversidad productiva tradicional sustentable como pilar de la soberanía alimentaria, territorial, social, ambiental y económica de nuestro país.
¿Por qué un Uruguay natural

multiproductivo?
6º) Preservación de la salud, dado el medio y condiciones de trabajo de esta actividad.


7º) Ingresos más estables al productor, industrial y comerciante; menores costos de los alimentos para el consumo interno.



8º) Mejor distribución de las tierras y otras riquezas materiales.



9º) Fortalecimiento de la soberanía alimentaria.



10º) Afianzamiento de la soberanía territorial.



11º) Vigorización de la soberanía económica.



12º) Mejores y crecientes mercados. Mayor independencia comercial.



13º) Mayores ingresos al país por aportes del productor, industrial, comerciante, consumidor y exportador. Reducción de gastos en los servicios públicos, caminería, insumos de exportación, salud, etc.



14º) Confianza, intercambio y convivencia pacífica con la región.


1º) Porque genera más fuentes de trabajo. El promedio de ocupación en la producción tradicional es de 90 personas c/1000has. (INE) 2º) Afincamiento de la familia productora en su medio. 3º) Conservación de los recursos naturales y ecosistemas.



4º) Preservación de las fuentes de agua dulce.



5º) Aromas agradables en la floración, maduración y elaboración de la mayor parte de estos productos, siendo sus desechos degradables y casi todos reutilizables en abonos, forrajes, etc.
15º) Respeto ante el mundo por nuestra cultura productiva, identificándosenos como “PAÍS NATURAL”.





Los alimentos (que Uruguay produce) en menos de diez años escasearán, los precios y mercados se multiplicarán. (informe UNESCO)



www.uruguay- natural.org
Asamblea por un Uruguay Natural Multiproductivo
(Unamu)
Contactos:
Teléfonos: (0520) 4158 / 096-829-893 / (0574) 3525 /(0520) 4153 /099-521-783
Correo electrónico: asamblea@uruguay-natural.org

martes, 2 de enero de 2007

CENSURAN A GALEANO

" LA SORDERA DE LOS “PROGRES”

“¿Que les pasó a los grandes medios de comunicación uruguayos? ¿Acaso no existe Galeano para ustedes?. ¿Pretenden tapar el sol con una mano?”

Los uruguayos saben muy bien que opina Víctor Hugo Morales sobre las plantas de celulosa de Botnia, Ence, y Stora Ence. No hay quien no sepa en nuestro país con que amor el gran peluquero argentino Roberto Giordano defiende las plantaciones de eucaliptos y la instalación de una planta de celulosa en Fray Bentos. Con que destaque y cuantos espacios generosos han dedicado todos los grandes medios de prensa uruguayos, a las opiniones contrarias a sus compatriotas de Gualeguaychú del gran y reconocido cineasta argentino Eduardo Montes Bradley.

La lucha de clases y el conflicto por las papeleras está llegando a Punta del Este por que el clima de agitación en cuanto los dirigentes progresistas y políticos se trasladan durante el verano a ese balneario también los canales de televisión convierten en noticia cada uno de los acontecimientos que allí la elite gobernante.



La locura piquetera esta vez llegó a “la Punta” donde unos doscientos “jóvenes piqueteros” cortaron la circulación de vehículos a la altura de la Avenida Roosevelt gritando consignas radicales a favor de la empresa BOTNIA.

Así es que comienza la cosa y nunca se sabe cuando se termina alentados por ideas foráneas los jóvenes siempre han sido “carne de cañón” de los intereses extranjeros y filosofías ajenas a la patria.

Todo comenzó en la disco “B.A” donde se encontraron alumnos de tres colegios montevideanos, dos de Carrasco y uno de Pocitos que mantienen viejas e históricas rivalidades irreconciliables.

Mientras los “chicos bien” se hallaban “chiveando” en la vía pública con diferentes grados de ebriedad, por que las personas de bien en Punta no se “maman” como los “vagos de la Teja” o “los negros bandidos” del Cerro, ellos más bien se hallaban en estado etílico.

Cuando abandonaron la pelea estudiantil generalizada se juntaron en el cantero central y otra parte en la calle y se pusieron a gritar ofensivas consignas radicales.

Al coro de “Porteños putos” y “Viva Botnia”, le acompañaban una serie de gestos obscenos seguidos por una especie de coreografía infamante para quienes tuvieron la mala suerte de presenciar la gresca.

Cuando llegó el primer patrullero bajaron las revoluciones y accedieron al diálogo con la autoridad. Luego de la concebida pedida de disculpas por molestar la reunión tan bulliciosa y entretenida, la autoridad no tenía otro remedio que pedirles comportarse tal como se les educa en los colegios mejor pagos de la capital.

Hasta golpearon el techo de un auto argentino, y otros argentinos fueron insultados.

En este país se sabe todo hasta lo más pequeño, hasta lo que pasa en las buenas familias de la sociedad uruguaya.

¿Nos preguntamos entonces por que hoy ningún diario, ninguna radio, ningún canal de televisión, consideró que era noticia la opinión sobre este gobierno, sobre las plantas de celulosa, sobre los dirigentes progresistas de uno de los principales intelectuales uruguayos el escritor Eduardo Galeano?.

¿Por qué?
¿Acaso no les gusta como piensa Galeano?
¿Será que tal vez no les conviene que la gente sepa lo que opina Galeano?
¿Alguien pagará para que la opinión de Galeano se oculte?
¿O será que se les está haciendo los mandados a alguien?

Lo cierto es que cualquiera se muere por una entrevista con Eduardo Galeano.
Nosotros conocemos muchos medios importantes de todo el mundo, que darían lo que no tienen por una entrevista de media hora con el escritor uruguayo.

Eduardo Galeano es para los jóvenes estudiantes de América Latina y el Caribe una verdadera institución del saber una referencia constante con su Biblia de cabecera “Las venas abiertas de América Latina”.

Solo la estupidez humana, el dogmatismo más severo y la imbatibilidad a esta altura muy preocupante de los progresistas puede ocurrírsele censurar a Galeano.

La periodista Ana María Mizrahi en el programa “La Noticia y su Contexto” que conduce por el canal oficial, canal 5, entrevistó al escritor compatriota Eduardo Galeano.

El intelectual uruguayo de reconocida trayectoria socialista sorprendió a la periodista con sus declaraciones y no interesó a los demás medios de prensa uruguayos.

“Mucha gente piensa que soy un traidor a la patria por decirlo (...). Las plantaciones forestales industriales nos van a dejar sin una gota. Es un modo de traicionar la voluntad popular del plebiscito expresado”

Así contestaba a la periodistas Ana Ma. Mizrahi a Eduardo Galeano en su programa La Noticia y su Contexto, que se emite por TVEO, Canal 5 , el día lunes 15 de enero de 2007.

Galeano : (...) “la trascendencia en general es buena, en el sentido de que se expresa en todas estas lindas novedades que han ocurrido y que siguen ocurriendo y es una voluntad de cambio; la gente quiere que las cosas cambien. Y eso es lo más importante, lo más rescatable y hay que estar a la altura de ese desafío, hay que ser digno de ese desafío, merecerlo. Porque la voluntad de cambio es muy importante, es muy importante que la gente reacciones creyendo que la realidad se puede transformar, contra toda una tradición jodida que hemos heredado de los viejos tiempos coloniales, que es la tradición fatalista de la resignación, lo que yo llamo la cultura de la impotencia, la idea de que mañana es otro nombre de hoy y que la realidad no se puede cambiar.
Pero la gente quiere cambios y eso me parece muy bueno, por eso no entiendo a algunos gobernantes progres, amigos, cuando dicen “nosotros hacemos la misma política, acá no cambió nada y vamos a continuar con lo que había”.

“Ah, pero entonces ¿por qué no deja que lo haga la derecha que tiene más experiencia?”

(...) “la mejor manera de este gobierno, que yo siento que es también mío porque al fin y al cabo he dedicado mi vida esperando que esto ocurriera alguna vez, pero la manera de ayudarlo es decir qué se hace. A mí la idea de convertir al Uruguay en un centro mundial de producción de celulosa me parece un disparate total”.

A. Mizrahi : Usted siempre dice lo que está pensando

E. Galeano : “Sí, y lo digo con todas las letras. Mucha gente piensa que soy un traidor a la patria por decirlo, pero es lo que mi conciencia dicta a mi lengua y así quiero seguir siendo, yo no nací para la obediencia. Creo que es un disparate convertir al Uruguay en un centro mundial de producción de celulosa porque la celulosa es devastadora. Entre otras cosas, nos va a dejar sin agua. Acá se hizo el único plebiscito en el mundo, el único en el mundo por el tema del agua, que declaró que el agua es un bien público. Las plantaciones forestales industriales nos van a dejar sin una gota. Es un modo de traicionar la voluntad popular del plebiscito expresado”.

Así están los progresistas uruguayos en el gobierno y así hipotecan el futuro del país, de la izquierda y de la esperanza de todos los uruguayos.

Así dilapidan el esfuerzo de todos nosotros, lo patinan, lo derrochan lo tiran a la marchanta y usted estático y paralizado, callado la boca obedece y se niega a ver lo que está sucediendo.

Gobierno, bancos, imperialismo, sindicatos, parlamento, empresarios, intendencias, medios de prensa todo en la misma bolsa, “ni un sí ni un no”, “todos juntos culo y calzón”.

Faltan pocos días para que estos mismo hombres del gobierno progresista, que usted votó, escuchó y siguió por todos lados firmen un nuevo tratado comercial con Estados Unidos.

Los guía y los dirige el ministro de Economía Danilo Astori, les ordena y exige el presidente de la república Tabaré Vázquez, pero los demás son obsecuentes, cómplices y obedientes y firman cualquier cosa de las que hasta ahora les han pedido.

Unos lo hacen de frente y encantados desde el comienzo, otros los más lamentables buscan excusas, pretextos, intentan justificarse y hacen pintar a sus pobres bases militantes consignas en las paredes contrarias a lo que firman sus líderes.

¿Pero hasta cuando les durará el doble discurso?

¿Y cuanto tiempo más demorará usted en darse cuenta del doble juego entre lo que se dice y lo que se hace?

Posiblemente ayude a entender todo el mal que en futuro nos harán estos tratados comerciales con Estados Unidos un simple ejemplo de lo que está ocurriendo en estos momentos en México.

Existe a nivel de Latinoamérica una “verdadera cultura del maíz”, ajena a nosotros, los pueblos que han mirado más a Europa que hacia el continente hermano.

Pero desde el norte Argentino y Paraguay hacia Centro América el maíz o “Milpa” forma parte de la vida y la cultura de los pueblos indígenas y campesinos. Cuando los españoles llegaron para conquistar el continente más de un centenar de variedades de maíz existían en Latinoamérica. Muy pocas van quedando ahora después que las transnacionales de la alimentación se apropiaron de las semillas y el manejo de la genética hace el resto con sus cruzas y mutaciones.

México tiene un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos llamado TLCAN.

La alimentación básica de los mexicanos es la tortilla hecha de harina de maíz. Prácticamente la harina de trigo no se conoce y solo es utilizada por los sectores más pudientes de la sociedad.

Las tortillas han incrementado su precio en 738 por ciento

Dice Luis Hernández del diario La Jornada de México que la tortilla a quebrado el modelo neoliberal.

El alza en el precio de la tortilla ha puesto al descubierto la debilidad del Estado mexicano frente a los monopolios.

Quienes controlan la comercialización e industrialización del maíz pueden organizar una corrida inflacionaria y salir impunes.

El Ejecutivo no cuenta con armas para combatir en esa guerra. Las últimas que tuvo las entregó hace siete años.

La respuesta del gobierno federal ante el incremento ha sido lastimosa. Cierra unas pocos lugares de venta de tortillas y difunde su acción en los medios de comunicación como si fuera una ofensiva frontal contra el abuso y esas empresas las culpables de lo que sucede.

Las acusa de no anunciar el precio de venta de su producto a la vista del público o de alterar las básculas. Lo cierto es que, más allá de que algunos de sus dueños se han aprovechado de la situación, ellos no son los responsables principales del aumento.

El Ejecutivo federal anuncia que próximamente va a permitir la importación de maíz blanco sin pago de arancel. Pero resulta que quienes van a adquirir el cereal son, en parte, los responsables del aumento, los mismos que controlan ya los inventarios. Y las importaciones van a golpear a los agricultores y campesinos del país, van a inundar el mercado con grano de mala calidad al tiempo que contaminarán sus sembradíos con variedades transgénicas y aflatoxina.

Por supuesto, la administración del presidente mexicano Felipe Calderón calla la información sobre quiénes son los especuladores. ASERCA tiene un reporte detallado de ellos.

Con la actual estructura de acopio y venta, en la que el gobierno federal subsidia la comercialización, cuenta con un informe preciso de quiénes tienen en sus bodegas el maíz.

Sin embargo, esta alza no proviene, tan sólo, de la incapacidad del gobierno para intervenir razonablemente en los mercados. El menos interesado en que se presentara una crisis como ésta es el Presidente de la República.

El incremento en el precio le abre un enorme boquete a su gobierno, ya de por sí necesitado de legitimidad. Ante la población más necesitada, ésta reprueba su gestión. De paso, abona el terreno para que la inflación crezca.

Más allá de los factores coyunturales que la precipitan, el incremento al precio de la tortilla muestra la crisis de la cadena maíz tortilla diseñada durante los gobiernos de Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo. El nuevo modelo desmanteló, en nombre de la modernización, un esquema en el que el Estado regulaba el mercado a través de la fijación de precios de garantía y la regulación de las importaciones.

Dejó a productores y consumidores inermes frente a las fuerzas del mercado, al tiempo que entregó el control del proceso a unas cuantas agroindustrias.

El anterior modelo estimulaba la producción garantizando a los agricultores un precio de garantía de su producto, proporcionando crédito y asistencia técnica. Para proteger los precios internos, el gobierno controlaba el grano que entraba al país a través de permisos de exportación.

Conasupo acopiaba entre 15 y 20 por ciento de producción, y por medio de sus filiales lo distribuía a comunidades remotas que no tenían abasto suficiente. De esta manera se combatía el acaparamiento del cereal y se mantenía una reserva nacional para enfrentar adversidades y tiempos difíciles.

Simultáneamente vendía la tortilla a un precio subsidiado, primero a toda la población y, después, a los más pobres.

Conasupo funcionaba como el principal abastecedor de la industria de molinos y masa nixtamalizada.

El esquema permitía asegurar el control del precio de la tortilla, elemento central en un país con salarios muy bajos.

El nuevo modelo, apalancado con el Tratado de Libre Comercio para América del Norte TLCAN, buscó, según el entonces subsecretario de Agricultura Luis Téllez, “permitir una transición ordenada de recursos productivos de los cultivos tradicionales a los cultivos de exportación”.

Al mismo tiempo, impulsó la reconversión productiva para que los campesinos maiceros abandonaran esta actividad, concentrándola en 30 por ciento de los productores con mejores recursos.

Impulsó basado en un estudio de Santiago Levy la importación de maíz barato desde Estados Unidos, argumentando que beneficiaba a los consumidores pobres y a los trabajadores asalariados del campo y la ciudad.

Fomentó el drenaje de la población rural “sobrante” con la promesa de integrarse al mercado de trabajo y programas de asistencia a la pobreza.

Desmanteló Conasupo y entregó a Minsa, Maseca y Cargill el control de los mercados de maíz, renunciando a contar con un banco de granos capaz de garantizar el abasto de maíz en situaciones difíciles. Y, finalmente, acabó con los programas de subsidio a la tortilla.

Los resultados de esta política han aparecido nítidamente durante esta última crisis. Desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio TLCAN en enero de 1994 la tortilla ha incrementado su precio en 738 por ciento. Como resultado de ello, su consumo por persona ha disminuido. Este alimento es, además, de peor calidad.

El saldo es brutal. En los mercados reina la ineficiencia. La comercialización e industrialización del grano se han concentrado en tres grandes empresas.

La alimentación de los mexicanos depende ahora mucho más de Estados Unidos.

Las semillas criollas se han infectado con variedades transgénicas de importación. La migración rural ha hecho de muchas comunidades poblados desiertos, habitados por ancianos, mujeres y niños. Una parte sustancial de la producción de cereal se ha trasladado a zonas de riego, que deberían estar dedicadas a otros cultivos. Frente a otros cultivos, cuyos precios sufrieron una fuerte caída ante la apertura comercial, el maíz se convirtió en un cultivo relativamente rentable.

Sin embargo, no todo es sombrío en el panorama. A pesar de tener todo en contra y a contracorriente de las previsiones de los tecnócratas, los campesinos mexicanos “siguen sembrando su milpa”.

En nuestro país el Uruguay por lo menos en el sur se aprecian mares verdes agitar sus olas de hojas parejas medidas exactas del maíz transgénico que se siembra para forraje del ganado.

El campesino pobre el chico prácticamente va quedando rodeado por los grandes establecimientos agropecuarios dedicados al cultivo extenso e intensivo, una vivienda de MEVIR de techo de dolmenit y dos piezas de bloques le espera a la familia rural en las orillas de los pueblos del interior.

Pero él TIFA se viene, se va a firmar y se va a poner en práctica favorecido por los dirigentes y legisladores progresistas y después de ello una nueva vuelta de tuerca se cerrará sobre los trabajadores y más pobres del Uruguay.

Ni ahora ni después se conocerán las verdades de estos documentos cuyo tramite se hace en el más absoluto secreto.

Un gobierno sin transparencia “es un gobierno que tiene cola de paja”.

Un gobierno que no cumple lo prometido, que no respeta la voluntad popular de los plebiscitos, que mantiene y aumenta los privilegios personales y de grupo no es un gobierno de izquierda ni puede ser jamás un gobierno progresista.

¿Qué pasó por ejemplo con los camiones de azúcar detenidos por la Aduana de Bella Unión que venían con destino para ALUR?

¿Quién puede creerse el verso que ALUR mandaba a laboratorio para que se investigara si el azúcar era refinado o crudo?

¿Quién no sabe a simple vista diferenciar entre el azúcar blanco y el azúcar negro?

MUCHA RAZÓN TIENE GALEANO CON SUS DECLARACIONES EN EL PROGRAMA DE CANAL.
LO QUE NO ES BUENO NI TIENE RAZÓN ES CENSURAR A GALEANO “POR QUE SU LENGUA DICE LO QUE LE DICTA SU CONCIENCIA”.
LO QUE NO PODRÁN HACER LOS PROGRESISTAS QUE “AHORA CON SU LENGUA NIEGAN, LO QUE HASTA HACE POCO LES DICTABA SU CONCIENCIA”.